Cuando se nace con una vocación muy definida, todas las actitudes de nuestra vida apuntan a ordenar
Cuando se nace con una vocación muy definida, todas las actitudes de nuestra vida apuntan a ordenar el tiempo, la economía, las ideas y el destino final de lo que hagamos. Este ha sido mi dogma desde la niñez. No pude jamás dejar pasar la vida en estado de pura contemplación- Elegí, entonces, el camino de las artes, que sin duda. Han colaborado en escribir el desarrollo de la humanidad. La plástica y sobre todo la escultura, ha perdurado a través de los milenios gracias a los materiales empleados: piedra, hueso, marfil arcilla y luego oro, hierro y bronce. Toda la historia del hombre puede leerse a través de la escultura. He ahí el valor de la “trascendencia”.